acuérdate de vivir

Ando más lejos de lo normal y camino mucho más de lo que te podrías imaginar. Qué manera de romper la rutina. La he partido en dos y me he pirado sin decir ni mu. Ahora sí que sé lo que es vivir porque me estoy dedicando plenamente a ello. Pierdo la cuenta de las veces en las que me falta el aire de la risa y ya no sé cómo ponerme triste, se podría decir que he perdido la costumbre de hacerlo. Que costumbre más fea si lo piensas. Ojalá pudiera perder las costumbres igual que pierdo los calcetines. Me he dado cuenta de que sobrevivir a base de recuerdos no me lleva a ningún sitio así que prefiero salir por la puerta y decidir cómo y con quien voy a crear nuevos. ¿Has tenido alguna vez la sensación de estar haciéndolo todo bien? Te sientes tan vivo, te sientes tan bien. Me faltan palabras para poder explicártelo. Pero todavía me quedan tantos lugares por descubrir y tantas personas a las que conocer que sinceramente, no puedo esperar: me marcho, no te puedo decir ni dónde ni cuándo volveré porque ni siquiera yo lo sé. Vida, qué bonito nombre tienes.

Laura Lozano